jueves, noviembre 16, 2006

Destiempo, por Enrique Lihn.


Nuestro entusiasmo alentaba a estos días que corren
entre la multitud de la igualdad de los días.
Nuestra debilidad cifraba en ellos
nuestra última esperanza.
Pensábamos y el tiempo que no tendría precio
se nos iba pasando pobremente
y estos son, pues, los años venideros.
Todo lo íbamos a resolver ahora.
Teníamos la vida por delante.
Lo mejor era no precipitarse.

4 comentarios:

ananda dijo...

siempre lo mejor es no precipitarse, siempre tenemos la vida x delante.
uhh a Enrique no lo he leído para nada, es mi 1era vez...me parece interesante indagar de su poesía, me la han recomndado...no en vano será.
preciosa fotografía.
muchas gracias x el compartir.
te quiero mucho.

suerte!

Patita dijo...

"Estos son pues los años venideros"... Qué fuerte! Pensar que el tiempo se escapa en las nubes y no vuelve más...

Me obsesiona eso de "perder el tiempo" la mayor parte de mis días desearía hacer algo fructifero (descansar entra en mi concepto), quizá por eso rechazo las peleas y los malos ratos... "Carpe Diem".

Un abrazo, a no precipitarse!

Hipólipo de Siracusa dijo...

Concuerdo, está muy linda la foto. Cómo escribe Huidobro: "Éramos los elegidos del sol y no nos dimos cuenta", este es el peligro que en cierta medida siempre corremos. Desperdiciar las oportunidades, no reconocer lo valioso, no poder distinguir lo que importa de lo que no, lo que vale la pena.

¿Qué podemos hacer que valga la pena? ¿Qué es lo que podemos hacer que sea realmente importante y valioso?

"Todo lo íbamos a resolver ahora. Teníamos la vida por delante".

Qué estamos esperando, qué esperamos que ocurra para poder hacer lo que queremos.

La vida es un conjunto de posibilidades ¿cuáles de ellas las haremos realidad? ¿cuáles de ellas eligiremos?

Más y más besos para ti...

Fernando.

Patita dijo...

La vida es un conjunto de posibilidades. Qué hermoso!

El decidir nos aterra a veces, porque no siempre esperamos enfrentarnos al cambio tan bruscamente, porque sentimos miedo de perder estabilidad, de perdernos en el intento...

Las cosas que valen la pena "son invisibles a los ojos".
En el último tiempo me he dado cuenta de lo mucho que importa que uno mismo sienta que vale la pena!

A lanzarse a la vida!
Besos!